haber paralizado el brazo del soldado que le incrustaba la corona de espinas. Pero no lo hizo. Notable. ¿Pero será esto lo más extraordinario de su venida? Muchos quizás digan que no. Otros tantos, quizás en mayor número, es posible que apunten más allá de su condición de infinito, a su condición de impecabilidad. Es fácil comprender por qué. ¿No es este el mensaje de la corona de espinas? Un soldado no identificado tomó ramas: suficientemente maduras como para tener espinas, suficientemente flexibles
Page 25